El impacto de la calidad de agua de las cuencas Choapa, Maipo y Rapel en la agricultura


El estrés salino y la presencia de metales, en especial los catalogados como pesados, produce una serie de efectos negativos para los cultivos; entre ellos, limita el crecimiento de las plantas, produce malformación de las hojas, causa clorosis y necrosis, incrementa la aparición de moho y marchites, e inhibe la germinación y crecimiento de polen, con pérdidas previsibles para el sector agrícola. Un inventario de los factores naturales y antropogénicos que afectan la calidad de los recursos hídricos en las cuencas analizadas revela que no solo las actividades industriales, mineras y agrícolas tienen influencia, sino que también la litología del suelo, la actividad volcánica y la aparición de aguas subterráneas y manantiales. Nuestros hallazgos deberían alertar a los agricultores sobre la necesidad de mejorar la calidad del agua antes de usarla para el riego.

Elementos que superan significativamente la norma

La composición química de las aguas naturales en Chile muestra una gran variabilidad a los largo del territorio nacional, marcada por un alto contenido de sales en las zonas áridas del norte, el que decrece significativamente en las regiones más húmedas del sur. Las aguas del Norte Grande, segun la informacion de la Direccion General de Aguas (DGA), poseen una conductividad que fluctúa entre 500 umhos/cm y 2.000 umhos/cm, que en ocasiones supera el valor máximo permitido por la Norma NCh1333 para riego (Orrego, 202). En el Norte Chico el contenido salino es menor, aunque suele aumentar en los cursos inferiores de los ríos, al punto que su uso es restringido, como sucede en los ríos Copiapó, Huasco, Elqui y Limarí. Sánchez et al. (2016) explican que la aparición de carbonato y sulfato de calcio, y otros minerales y compuestos ocurre a partir de la meteorización de las rocas, que luego son transportados por el agua de riego y depositados en el suelo, donde se acumulan en la medida que el agua se evapora o es consumida por los cultivos. En un estudio reciente realizado por el Centro de Recursos Hídricos para la Agricultura y la Mineria (CRHIAM) se analizaron datos de la química del agua de las cuencas del río Choapa, río Maipo y río Rapel ubicadas en el centro-norte de Chile (Figura 1), en el periodo 2008-2016, y se evaluaron en el marco de los parámetros de calidad de agua para riego estipulados en la normativa chilena NCh1333. Los valores de la base de datos de la Dirección General de Aguas (DGA), mostraron que los elementos boro, cadmio, mercurio y molibdeno superan significativamente la norma en la mayoría de las estaciones de monitoreo, y que también lo hacen, aunque en menor grado, la salinidad medida como conductividad especifica, el sulfato, el manganeso y la relación de absorción de sodio. En este articulo se analizan los fatores naturales y antrópicos que contribuyen al aumento de elementos y compuestos en el agua de estas cuencas y se instala un alerta respecto a los efectos negativos de la mala calidad del agua sobre la actividad agrícola.


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Fuente: Redagricola | Chile N° 109


19 de Marzo de 2020