Hortaliceros atacameños buscan replicar proyecto hidropónico en medio del desierto.

Realizaron una gira tecnológica a una iniciativa de hidroponía que se ejecuta en Antofagasta, instancia en que conocieron la historia y el funcionamiento para cultivar hortalizas en ese lugar. Finalizada la visita, el seremi de Agricultura indicó que el p

Eduardo Pérez, es un agricultor copiapino conocido en el Pueblo San Fernando como "Don Yayo". Después de intentar encontrar suerte en la minería en la Región de Antofagasta, y al ver a su padre que ya tenía sus años y trabajaba solo su parcela, decidió regresar a Atacama y dedicarse a la agricultura.

De eso ya han pasado más de 35 años y hoy en su predio cosecha lechugas, pimentones, zapallos italianos, tomates, cebollines, entre otras verduras que comercializa aquí en la ciudad. Su producción la realiza a campo abierto y en invernaderos, en donde protege tomates y morrones de heladas y posibles plagas, pero siempre ha tenido la inquietud de conocer la hidroponía e implementarla en sus tierras.

Desde el año 2011 se ejecuta en el sector de la Chimba de Antofagasta, un proyecto de hidroponía desarrollado por socios de la Asociación Gremial de agricultura "Alto La Portada de Antofagasta" y "Don Yayo" que actualmente es presidente del CADA (Consejo de asesor de área) del Instituto de Desarrollo Agropecuario, INDAP, y director de la Junta de Vigilancia del río Copiapó, siempre tuvo la inquietud por conocerlo, por lo que el secretario regional ministerial (seremi) de Agricultura, Patricio Araya Vargas, recogió esta inquietud y realizó una gira tecnológica al lugar.

Haciendo agricultura en el desierto

La Asociación Gremial de agricultura "Alto La Portada de Antofagasta", Asgralpa, formada por 140 socios hoy le gana terreno al desierto, cultivando hortalizas en sectores otrora baldíos y que con mucho esfuerzo han logrado ser convertidos en invernaderos que hoy producen mensualmente cerca de 8 toneladas de lechugas y 8 toneladas de acelgas.

¿Pero cómo lo hacen? Hoy ocupan en el sector de La Chimba, cerca de 70 hectáreas y cada socio posee 0,5 hectáreas que poseen invernaderos, los cuales en su interior han sido implementados con camas de agua que albergan todo tipo de hortalizas y plantas medicinales.

De acuerdo a lo señalado por la presidenta de esta agrupación, Dolores Jiménez, surgió a propósito de una prohibición de regar con aguas servidas, "por lo tanto de esa situación nació la necesidad de hacer hidroponía. Y fue así como en el año 2006 citamos a todos los agricultores de Antofagasta para que formáramos Asgralpa, que es la que yo lidero en este minuto. Entonces presentamos un proyecto a Bienes Nacionales para establecernos en un lugar y obtuvimos un comodato a 7 años, que ya se cumplieron y hoy el Ministerio de Agricultura con Bienes Nacionales nos entregaron por 25 años los terrenos, que esperamos que pasen de onerosos a gratuitos, ya que hoy pagamos 3.744UF al año".

Para poder concretar este proyecto no sólo no contaban con un terreno con tierras aptas para ser cultivables, sino que además carecían de agua. Consultada Dolores Jiménez, de cómo sortearon este problema que no es menor, aseguró que "tenemos la suerte que a través del ducto que va con agua hacia Mejillones, Aguas Antofagasta firmó un convenio con nosotros el año 2013, para hacer las aducciones del agua hacia dos estanques que tenemos arriba de 30 cúbicos cada uno, los que llenamos con agua potable desalinizada. Esa agua sale en camiones aljibe para cada una de las parcelas, diariamente. El mayor problema que teníamos era el costo del agua, que cuando empezamos en el 2010 era de 8 mil pesos el metro cúbico de agua, mientras que a través de la empresa privada Komatsu, ellos creyeron en nosotros y a través de don Aurelio Piqué que era el gerente general, nos donó 280 millones de pesos para hacer esa aducción directo hacia donde están los estanques hoy día, entonces eso significó que pagamos 3 mil pesos el metro cúbico. Hoy día ha subido el costo porque arrendamos el camión aljibe, pero queremos optar a un crédito de INDAP para poder comprar un camión aljibe".

El desafío para Atacama

Tras finalizar la visita al proyecto hidropónico, el seremi de Agricultura, Patricio Araya Vargas, dijo que "este proyecto es absolutamente posible replicarlo en Atacama y la condición las colocan las personas, siempre y cuando estén interesadas en ver cómo mejoran su producción y puedan acceder de mejor forma al mercado, con productos inocuos y de calidad, porque eso es lo que piden los consumidores".

Por su parte el agricultor Eduardo Pérez señaló que "fue una visita muy linda, lo quería conocer hace mucho tiempo y me voy con la inquietud de buscar agricultores de Copiapó que trabajemos en esta área que es algo renovable y que para mí es el futuro de los agricultores de Chile, por la escasez de agua que tenemos".

Consultado respecto de si sus campos podrían ser adecuados para hacer cultivos hidropónicos, manifestó que "en Antofagasta partieron de cero y nosotros no partiremos de cero, porque tenemos tierra, agua, cierres, algunos tenemos los invernaderos, sólo necesitamos el impulso y el apoyo de INDAP para ingresar a los supermercados, porque este tipo de producción no es para la feria".

Eduardo Pérez regresó de Antofagasta con la idea de volver con más agricultores que quieran hacer hidroponía en Atacama, ya que "el objetivo era venir, ver de dónde sacaremos los recursos para venir con varias personas que vengan con la actitud no de pasear, sino que a aprender cómo hacer hidroponía. Gente que le guste renovar, porque podemos venir muchos, pero hay que venir a aprender esta técnica".


Fuente: Diario Atacama. 24 de junio de 2019, pág 2.


24 de Junio de 2019